Ya lo decía la canción:
"Well, it would've been, could've been worse than you would ever know."
Mi enemigo, pese a los kilometros de distancia había hecho de las suyas...
Es cierto, que en realidad mi enemigo no tuvo nada que ver, pero estos guionistas de mi vida que han decidido ponerme trampas y enredos cada vez más difíciles, pero eso si, menos originales.
Lo que sucedió fue que me encontraba yo en mi lugar de trabajo, todo bien, todo tranquilo como siempre. En eso que llega un sujeto, un chico de unos 26 años, muy guapo, de sonrisa simpática y andares mozos. Sin duda lo ví un momento y regresé a mi computadora hasta que en unos segundos me llegó como un estremecer por todo el cuerpo, ' Ese chico es demasiado parecido a mi peor enemigo´.
No podía quitarme esa idea de la cabeza, pensé que era sólo un sujeto que venía por algún reporte o por algún documento y que así como llegó, así se iría. Ah pero estos enredos de la vida que lo único que saben hacer es ponerle problemas ya repetidos al buen papamio!.
Resultóse que el sujeto había trabajado con anterioridad ahí, y que según pude entender, estaba trabajando en un proyecto en otra ciudad de este país.
Ahora bien, el copy-enemigo, estaba trabajando a un lado mio, y pese a su parecido con mi enemigo a quién por siempre me atará un sentimiento de rencor y de odio (ya en otra ocasión les contaré esta triste y reveladora historia), había un no sé qué, que él emitía que me ponía en una situación, entre pensamientos de calentura así como de odio, bien dicen sobre la existencia del odioamoramiento (que si bien no es el caso, eran unos sentimientos similares los que experimentaba).
Entonces, puesto que no podía concentrarme del todo, opté por realizar algunos encargos por fuera de la oficina, incluso tomé un poco más de tiempo de mi hora de comida para poder estar lejos de él.
Ya en la tarde, cuando el ritmo es más relajado, las mujeres suelen empezar a platicar cosas a la vez que trabajan. Ahí fue cuando todo perdió sentido.
En vista que todos estaban platicando de babosadas mientras trabajaban (yo sólo con un audífono) escucho que uno de los jefes dice algo como "ay no seas puto!" como en broma e insulto... el copy-enemigo (gay declarado) le dice "¿puto?" y se suelta riendo... a lo que el jefe también se ríe... eso fue el comentario que desató lo siguiente.
Todos se fueron de la oficina, menos dos chicas y yo. Una de las chicas tendrá unos 25 años (medio nacona de rodeo y muy llevadita) y la otra más profesional, pero igual de metiche... que empiezan a decir que iban a hacer burla de uno de la oficina que se rumora que es gay (por sus expresiones medio afeminadas) y que si será o no será y que si tiene novia...
Odio esos chismes y esas ganas de a toda costa emterse en la vida de otra persona... por esa razón no participé en la plática de esas tipas... entonces, que las muy hijaeperras sobretodo la nacona llevadita de rodeo empieza a decir "pues el que yo creí que era gay era acá a mis ojos" y me voltea a ver...
¡QUE CHINGADOS! y la otra babosa hijaeputa que le contesta "si, yo también eh... jaja... papamio! eres gay?"
A ver, a ver...
Es cierto que con mis amigos yo hago lo que me plazca y hablo sin pudor de si un chico me agrada o no, incluso hago bromas sobre la sexualidad y sobre expresiones exageradas, pero vamos que en mi vida profesional guardo el respeto y en pro de la cordialidad nunca voy más allá de bromas del día a dia sin entrar en temas privados.
Entonces, ¿estas cabronas qué carajo tienen que andar haciendo preguntando sobre la vida privada a su compañero de trabajo?
Dije que no y me molesté. Finalmente ellas qué son para andar indagando sobre mi vida. Habrá algunos que me recomienden haber dicho "si soy gay y qué" o simplemente no negarlo, pero miren que a pesar que se dice que la igualdad y que los tiempos cambian, lamentablemente existen prejuicios, en la vida laboral es la competencia y si alguien titubea, no lo duden que se querrán aprovechar de eso. Error meter la vida privada en el campo de la vida profesional. De haber dicho que si, me habría tenido que volver el chico homo de la oficina, el amigo jotito de las viejas metiches, el pinche joto cuando hiciera algo mejor que ellas, el amiguito de chismes en contra de los jefes, el 'ay babosa' de las amigas... hubiera sido el estereotipo gay de la oficina... yo no estoy para esa estupidez.
Dije que no, entonces. Ellas quisieron componerlo diciendo "es que quizá por cómo hablas pensamos que si... ", pero algo me dice que fue el copy-enemigo que seguro habló sobre mí. Eso del gaydar será bueno en casos, pero no cuando un perfecto pendejo, se aprovecha para ventanear a la gente.
Estaba tan molesto y tan incómodo en la oficina, que decidí ir a la tienda por un refresco. Antes de poder bajar las babosas me preguntan que si estoy enojado... dije que no, peor obviamente transmití la vibra que si estaba incómodo y molesto, vale madre.
Ya en la plantaba baja, hablé con un amigo que em recomendó estar tranquilo, que anda ganaba con dejarlas creer que estaba enojado. Subí y de nuevo el copy-enemigo y las viejas metiches. Unos minutos después se va el copy-enemigo y me dejan con las viejas esas... y es cuando vuelven otra vez a platicar conmigo.
CARAJO que no ven que intento trabajar... ah pero que me dicen "ay papamio! perdón si te hicimos enojar... es que ya lo pensé, si a mi me dijeran que si soy lesbiana, pues si me sacaría de onda"
Ay cállate estúpida, que nada de lo que digas puede volver a establecer ese ambiente de cortesía y cordialidad. Y la vieja naca de rodeo, empieza a querer ser buena onda conmigo y darme dulces y sacarme plática...
Han arruinado la convivencia, eso es todo.
